F1 Gran Premio de China

Si alguien tiene algo que celebrar ese es el equipo Mercedes AMG y su piloto Lewis Hamilton. La escudería teutona porque materializó su tercer doblete del curso, en tres salidas, y Hamilton porque se corrió el GP número 1000, desde que se inició la F1 en 1950, y lo ganó. Lewis, además, también ganó el número 900 en 2014 y el 999 recientemente en Bahréin. El inglés se va de China como líder del campeonato y Mercedes AMG como verdugos de la parrilla. Ferrari no tuvo el ritmo de las flechas de plata, además de trabarse en la estrategia de carrera, el perjudicado fue Leclerc, quien a duras penas pudo ser quinto. Aburrida carrera donde la nueva normativa aerodinámica no cumplió su objetivo y solo fueron seis monoplazas, otra vez, los que terminaron en la misma vuelta. Mercedes AMG, Ferrari y Red Bull marcan una diferencia abismal con el resto; sin embargo, Ferrari no acaba de exponer todo su potencial sobre el asfalto y Red Bull adolece de potencia en su mecánica Honda. Pierre Gasly se hizo del punto por vuelta rápida y queda esperar por el GP de Bakú para ver si esto cambia o la vida sigue igual.